Aquí en Saludeo consideramos al café, nuestra mejor elección para revitalizar nuestras mañanas, o para sentirnos reconfortados al final de una larga jornada. Su sabor seductor y su poder energético son sus más conocidos atractivos. Sin embargo, hay mucho más que eso.
Es que en realidad, el café es una de las bebidas más saludables del mundo. La reducción de la grasa, la optimización de nuestros niveles de energía y mejoras en nuestro rendimiento intelectual, son algunas de las rubricas del café en nuestro cuerpo.
Claro está que la cirrosis hepática no tiene cura alguna, sin embargo estudios realizados en Southhampton University encontraron, además, que la cafeína es un importante combatiente de la cirrosis hepática, enfermedad producida un 50% por el consumo desmesurado del alcohol, según la OMS. Tomando en cuenta los estudios citados, se afirma que consumir una taza de café diaria reduciría hasta en un 22% el riesgo de desarrollar cirrosis en un futuro.
Día a día, nuevas investigaciones sobre el café van apareciendo, y poco a poco abren nuestro panorama acerca de su importantísimo papel en nuestra dieta diaria. Queda a juicio suyo la inclusión del café en su régimen. Al final, no solo su paladar sino también su cuerpo lo agradecerán.
¿Qué vas a encontrar en este artículo?
Es la fuente número uno en antioxidantes
Si, por delante de muchas frutas y verduras. Dentro de la dieta occidental tradicional, el café es la mayor fuente de antioxidantes que existe.
Ergo, nos preguntamos: ¿Qué son los antioxidantes y que función cumplen?
En el proceso de degradación de los alimentos, en la exposición al humo del tabaco o a la radiación, o en cualquier proceso de oxidación celular, se generan radicales libres, moléculas que dañan las células a tal punto que pueden provocar enfermedades del corazón y hasta cáncer. En esta instancia, son los antioxidantes nuestros mejores amigos, ya que son agentes reductores que protegen nuestras células de los efectos de los radicales libres.
Por lo tanto, si usted quiere aumentar la cantidad de antioxidantes en su organismo, no dude en servirse otra taza de café.
Previene la diabetes tipo II
“La diabetes tipo II ha sido catalogada como la epidemia del siglo XXI, tanto por su creciente magnitud como por su impacto en la enfermedad cardiovascular, primera causa de mortalidad en las sociedades desarrolladas” cuenta el doctor Carlos Valdez, del departamento Endocrinología y Nutrición del Hospital Carlos Haya de Málaga en su estudio Evolución de la prevalencia de la diabetes tipo II en población adulta español (2007).
Con el paso del tiempo, esta afirmación ha cogido una mayor consistencia, puesto que la Diabetes tipo II se ha convertido en un problema gigantesco para la medicina moderna, ya que afecta a más de 300 millones de personas en el mundo actualmente.
¿En qué consiste la intrusión de la diabetes tipo II? Compromete los niveles de azúcar en la sangre, elevándolos al punto de que el organismo detiene la secreción de insulina, hormona que regula la glucosa en la sangre, y en ciertos casos incita nuestro sistema a rechazarla.
Estudios recientes comprobaron que el café es muy importante en la prevención de la diabetes. En el 2014, en un recuento de tres estudios en los que se evaluaron a 123.000 personas durante un periodo de 20 años, los investigadores coincidieron en que el consumo de 1 taza y media de café diario por más de 4 años reduce en un 11% el riesgo de desarrollar diabetes tipo II. Es más, en los casos de consumo mayor a tres tazas de café al día se redujo en un 37% por ciento la contingencia.
Puede aumentar tus niveles de energía
El efecto revitalizador de la cafeína es uno de sus más valiosos y reconocidos atributos. La explicación científica está en que funciona como estimulante del sistema nervioso, recargando nuestras baterías cual carrito a control remoto. La cafeína es de fácil absorción y va directamente al cerebro sin acumularse en el torrente sanguíneo
Una vez dentro del sistema nervioso bloquea la Adenosinina en nuestro cerebro. Cuando este neurotransmisor inhibidor se encuentra bloqueado, la cantidad de otros neurotransmisores tales como la dopamina y la norepinefrina aumenta. Y eso no es todo, aumenta los niveles de epinefrina (Adrenalina) en la sangre.
Esto conduce a un aumento en la activación de las neuronas en el cerebro que reduce el cansancio, los tiempos de reacción, mejoran las funciones cognitivas y deja al cuerpo listo para la actividad física intensa. Consumir 1 o 2 tazas de café al día producirá un efecto de activación que se alargará hasta el final de la jornada.
Reduciría el agravamiento del cáncer de mamas
En el 2015 un estudio publicado en la revista Clinical Cancer Research, se descubrió que las sobrevivientes al cáncer de mama que bebían al menos 2 tazas de café al día tenían un 50% menos de posibilidades de recurrencia en comparación las que no sostenían la cafeína en su régimen.
El estudio realizado por la división médica preventiva del Brigham and Woman’s Hospital contó con 1090 pacientes con cáncer, y comprobó, al cabo de una década, que estas presentaban tumores más pequeños y también una menor proporción de tumores después de la inserción del café en su dieta diaria.
Es propicio detenernos aquí y precisar que hasta el día de hoy existe un debate sobre la veracidad de estos estudios, ya que muchos médicos especializados dudan de la relevancia de la cafeína en el tratamiento del cáncer de mamas.
Reduce la depresión y mejora el estado anímico
La depresión es un trastorno mental que se caracteriza por el decaimiento anímico, perdida de interés y la baja autoestima. Este trastorno ha devenido en la reducción significativa de la calidad de vida. De más de 350 millones de personas en el mundo.
Estados unidos es uno de los países con mayor índice de depresión. Actualmente el 4.1% de la población americana ha sido diagnosticada con depresión clínica.
El papel del café, según un estudio realizado por la Universidad de Harvard, sería de gran preponderancia para combatir este mal. En este estudio publicado en el 2011 se observó a más de 50.000 mujeres libres de síntomas depresivos al inicio del estudio en 1996. Al cabo de diez años se dieron 2607 casos de mujeres con depresión, mujeres que consumieron una o menos tazas de café al día. Mientras que las que adhirieron el café a su régimen alimenticio consumiendo de 4 a 5 tazas redujeron en 20% los riesgos de sufrir de depresión.
Ayuda a quemar grasa
¿Sabías que muchos productos de adelgazamiento o complemento incluyen en su composición cafeína? Pues sí, y es debido a su gran efecto lipolítico o “quemador de grasas”.
El argumento principal de diversos expertos es que la cafeína aumenta la tasa metabólica en un 3-11% y acelera la degradación de las grasas en el organismo.
En un estudio realizado por el Departamento de Nutrición Humana de la Universidad Agrícola de Wageningen doce varones jóvenes consumieron 150ml de café descafeinado al que se le agregó 200ml de cafeína. Su temperatura corporal acrecentó y su metabolismo se aceleró en un 30% y el efecto se extendió hasta 3 horas después.
Si bien es cierto la opinión generalizada acepta la función lipolítica de la cafeína, es conveniente señalar que mucho expertos advierten que los efectos podrían disminuir en bebedores a largo plazo.
